Gracias a las diferentes gamas de colores de las que disponemos y la garantía que nos da a la hora de colocarlo sobre la superficie (muchas veces irregular) de los ascensores, este es el tipo de pavimento que más recomendamos para el interior de las cabinas.
Gracias a la poca porosidad con la que cuenta este tipo de suelo se mejora en la resistencia a las manchas, es fácil de mantener y tiene una durabilidad mayor.
Gracias a la poca porosidad con la que cuenta este tipo de suelo se mejora en la resistencia a las manchas, es fácil de mantener y tiene una durabilidad mayor.
Silestone es una superficie no porosa y altamente resistente a las manchas y dispone de una enorme variedad de colores y texturas.
Este tipo de suelo es el más recomendado para ascensores con una carga enorme de tránsito de personas y maquinarias, así como para montacargas e incluso se puede colocar en paneles a efecto de material anti vandálico.